Se fractura la Segunda Marquetalia mientras Mancuso regresa al Caribe para rastrear bienes destinados a la reparación de víctimas

Las fracturas en la Segunda Marquetalia, que el presidente califica como un avance hacia la paz, coinciden con la autorización a Mancuso para localizar bienes y reparar víctimas en el Caribe.

El Tribunal Superior de Barranquilla ha autorizado al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso para participar en la localización de bienes con fines de reparación a las víctimas del conflicto armado en la región Caribe. Esta decisión responde a una solicitud de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), que busca rastrear propiedades entregadas por las extintas AUC, muchas de las cuales han perdido su registro tras ser transferidas al Estado.

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El magistrado Carlos Andrés Pérez, de la Sala de Justicia y Paz, aprobó el permiso que estará vigente hasta el 31 de enero de 2025. Mancuso podrá desplazarse por los departamentos de Córdoba, Sucre, Bolívar, Atlántico, Magdalena, Cesar y La Guajira, exclusivamente con el objetivo de rastrear y recuperar bienes. Esta actividad será supervisada por la ANT, dadas las restricciones legales impuestas al exlíder paramilitar, quien se encuentra en libertad condicionada.

La decisión marca un hito importante en el proceso de reparación, ya que los desmovilizados de grupos armados ilegales tienen prohibido acercarse a las víctimas o regresar a las zonas donde operaron. Sin embargo, el Tribunal destacó que estas restricciones no deben obstaculizar su compromiso de aportar a la verdad y la reparación.

Desde la Mesa de Víctimas del Atlántico se ha aplaudido esta medida, considerándola un paso crucial hacia la justicia y la reconciliación. «Es un avance significativo que este señor pueda liderar la identificación de bienes, lo que representa un verdadero camino hacia la paz para miles de familias», expresó Misael Delgado, víctima del conflicto en el Caribe.

Mientras tanto, otro capítulo del conflicto armado colombiano se desarrolla con tensiones internas en la Segunda Marquetalia, la disidencia de las Farc liderada por alias Iván Márquez. Recientemente, una carta atribuida a Márquez desautorizó al jefe negociador Walter Mendoza para continuar con la mesa de diálogos de paz con el Gobierno.

Según el presidente Gustavo Petro, estas divisiones reflejan una lucha interna entre quienes apoyan un camino hacia la paz y aquellos que prefieren continuar en actividades bélicas y criminales. «Esta fractura en los grupos violentos es un avance en la paz. Lo que trae la paz es el cambio, la transformación real de los territorios abandonados de Colombia», afirmó Petro en sus redes sociales.

A pesar de las dudas sobre la carta, Walter Mendoza confirmó que la mesa de diálogo seguirá activa, subrayando el compromiso de su delegación y otros grupos armados aliados con el cese al fuego y la búsqueda de un acuerdo de paz duradero.

La autorización a Mancuso y las fracturas en la Segunda Marquetalia ilustran dos caras de un mismo desafío: superar décadas de violencia en Colombia. Por un lado, se busca reparar a las víctimas a través de la recuperación de bienes; por otro, se libra una batalla política y estratégica para consolidar acuerdos de paz.

El Gobierno nacional, liderado por Gustavo Petro, insiste en que no cederá frente a quienes se nieguen a deponer las armas. «Quienes no acepten el camino de la paz serán doblegados por la fuerza pública», advirtió el mandatario.

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