Petro lleva a Álvaro Leyva ante la justicia por su presunto papel en el asesinato de Miguel Uribe

Gustavo Petro denunció penalmente a su exministro Álvaro Leyva, acusándolo de instigar el atentado que acabó con la vida del senador Miguel Uribe Turbay.

El presidente Gustavo Petro, a través de su apoderado, presentó ante la Fiscalía una denuncia penal contra su exministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva Durán, acusándolo de haber sembrado el terreno para el atentado que acabó con la vida del senador opositor Miguel Uribe Turbay.

En un explosivo documento de más de 20 páginas, el abogado Pedro Alejandro Carranza señala que Leyva habría cometido delitos como conspiración, instigación a delinquir, calumnia, injuria y menoscabo de la integridad nacional. La denuncia sostiene que el exfuncionario construyó “una narrativa de alta carga emocional, simbólica y política” con la que pretendía mostrar a Petro como incapaz mentalmente para ejercer la Presidencia.

Pero lo más grave está en la hipótesis central: Leyva habría instigado, de manera indirecta, el asesinato de Uribe Turbay. El documento afirma que el excanciller tuvo contacto directo con la disidencia de las FARC conocida como Segunda Marquetalia, comandada por ‘Iván Márquez’, a la que las autoridades atribuyen el ataque contra el congresista.

“En uno de sus textos incluso llegó a sugerir que ‘una tragedia podía ocurrir’ como consecuencia de las palabras del presidente”, recoge la denuncia. Según Carranza, esa “profecía” contribuyó a crear un clima que validaba la violencia como mecanismo legítimo de acción política. Semanas después, Miguel Uribe fue atacado a bala y murió el 11 de agosto.

La relación entre Petro y Leyva, alguna vez aliados inseparables, se quebró de forma definitiva el 23 de abril, cuando el excanciller, sin pruebas, acusó públicamente al presidente de ser adicto a las drogas y le pidió someterse a exámenes toxicológicos. En mayo, Leyva redobló sus ataques afirmando que Petro “está enfermo”.

El 29 de junio, audios revelados destaparon otro capítulo oscuro: Leyva habría buscado apoyo en Estados Unidos, el ELN y el Clan del Golfo para derrocar a Petro y reemplazarlo por la vicepresidenta Francia Márquez. Incluso mencionó a la precandidata Victoria Dávila como parte de la trama, algo que ella desmintió tajantemente.

En audiencia judicial, Carranza lo confrontó:

  • “¿Vio en alguna ocasión al presidente consumir alguna sustancia alucinógena? Respóndame sí o no”.
  • “No, directamente no. Claro que no”, admitió finalmente Leyva, tras intentar desviar la respuesta.

Pese a la gravedad de sus afirmaciones y al atentado contra Uribe, Leyva nunca rectificó ni condenó el crimen. Para el equipo jurídico de Petro, este silencio, sumado a la divulgación de información sensible sobre ‘Iván Márquez’, constituye un peligroso mecanismo de legitimación de la violencia.

Mientras la investigación sigue abierta, lo cierto es que la denuncia deja a Álvaro Leyva contra las cuerdas, salpicado por una trama que mezcla conspiración política, contactos con grupos armados y un crimen que estremeció al país. Petro, por su parte, ha dejado claro que no dará un paso atrás frente a lo que considera un acto de traición y desestabilización contra su gobierno.

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