La justicia colombiana acaba de ratificar un golpe demoledor contra una de las figuras más influyentes del gremio ganadero: Jorge Visbal Martelo. La Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó la condena de nueve años de prisión contra el expresidente de Fedegán y exembajador de Colombia en Perú por sus estrechos nexos con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y su cercanía con el máximo jefe paramilitar Carlos Castaño Gil.
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Lo que revela el expediente es aterrador: entre 1998 y 2005, mientras Visbal hacía parte del Consejo Nacional de Paz, sostenía reuniones secretas en fincas de Córdoba con los comandantes de las AUC, a quienes no solo les mostraba afinidad ideológica sino que además pedía su expansión a zonas ganaderas con presencia de la guerrilla. Incluso, según la Corte, terminó convertido en un “asesor de alto nivel” de Carlos Castaño, al punto de compartir tragos con él en sus encuentros.
La Corte Suprema ratificó la condena contra Jorge Visbal Martelo, expresidente de FEDEGÁN, por paramilitarismo.
— Alejandro Ocampo (@alejoocampog) August 20, 2025
Ahora el uribismo dirá que no lo conoce, pero lo indemnizaron con un millón de dólares de pensión, camionetas y bonificaciones, todo con recursos públicos. pic.twitter.com/TbDRolqcsk
“Lo que revela la prueba es que además de la afinidad ideológica mostrada con las Autodefensas, acudía a los jefes paramilitares para pedirles que hicieran presencia en aquellos territorios o zonas ganaderas con alto predominio guerrillero, como también hacía parte de un grupo asesor del máximo comandante de las AUC”, señala la sentencia de 78 páginas.
Las pruebas son contundentes y se apoyan en los testimonios de jefes paramilitares como Ernesto Báez, ‘Don Berna’ y Salvatore Mancuso, quienes confirmaron que el expresidente de Fedegán no era un simple asistente, sino un colaborador activo de la estrategia paramilitar.
Pero lo más indignante del caso es el contraste histórico que hoy sale a la luz. En diciembre de 2003, mientras las investigaciones apenas asomaban, Álvaro Uribe Vélez, entonces presidente de la República, condecoraba a Jorge Visbal con la Orden de Boyacá en el grado de Cruz de Plata, describiéndolo como un “héroe” y un “ejemplo de valor civil” para el país.
En 2003, el Presidente Álvaro Uribe le entregó a Jorge Visbal la Cruz de Boyacá por su “ejemplo de valor civil” como Presidente de FEDEGAN…hoy Visbal fue condenado por nexos con el paramilitarismo.
— ¡No más corrupción! (@carlos_franco78) August 19, 2025
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“Siento un gran honor al entregar la Cruz de Boyacá a Fedegán y que la reciba el doctor Jorge Visbal Martelo, hombre de tantas ejecutorias y de tanta valentía. Su inteligencia, su empuje, su ordenada mente, su imaginación para encontrar soluciones, son una garantía para la ganadería y para el desarrollo de Colombia”, proclamó Uribe en medio de aplausos.
Ese mismo hombre al que Uribe exaltó como símbolo de la democracia en el campo, hoy está condenado por concierto para delinquir agravado, tras comprobarse que no solo simpatizó con los paramilitares, sino que aportó políticamente a su causa y pagaba cuotas a cambio de seguridad.
La Corte Suprema cerró la puerta a cualquier recurso, al confirmar que no hubo violación de garantías procesales ni prescripción. La ponencia, a cargo del magistrado Gerson Chaverra, fue tajante al señalar que Visbal utilizó su rol en el Consejo Nacional de Paz como fachada, mientras en paralelo fortalecía a los paramilitares y asesoraba a su comandante máximo.
La decisión ordena su captura inmediata y le niega beneficios como prisión domiciliaria o suspensión de la pena.
El caso deja en evidencia una herida abierta en la historia reciente de Colombia: los estrechos vínculos entre sectores del poder político, económico y el paramilitarismo. La foto de Uribe condecorando a Visbal como “defensor de la democracia”, contrasta hoy con la condena que lo señala como aliado de uno de los ejércitos ilegales más sangrientos del país.





