Madres de falsos positivos estallan en acto oficial y le exigen a Uribe pedir perdón por las ejecuciones del Ejército

En Yopal, las madres de las víctimas de falsos positivos lanzaron un reclamo contundente: “Quien debería estar pidiendo perdón aquí es Álvaro Uribe”, durante el acto de disculpas del ministro de Defensa, Pedro Sánchez.

El silencio de Álvaro Uribe Vélez retumbó más que cualquier discurso durante el acto de perdón público que encabezó el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, este fin de semana en Yopal. Allí, frente a las madres y hermanos de 27 campesinos asesinados por el Ejército y presentados falsamente como guerrilleros, el reclamo fue directo: “Quien debería estar pidiendo perdón aquí es Álvaro Uribe”, gritó una de las madres, entre lágrimas, mirando al frente.

El evento, ordenado por 22 sentencias judiciales y reconocido por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), buscaba ofrecer disculpas a las familias de las víctimas de ejecuciones extrajudiciales ocurridas entre 2002 y 2008, durante el gobierno de Uribe y bajo su política de Seguridad Democrática. Pero lo que se suponía sería un acto solemne terminó convertido en un clamor de justicia.

Las cifras estremecen: 6.402 civiles fueron asesinados en todo el país por miembros del Ejército y presentados como bajas en combate. En Casanare, según la JEP, 303 personas fueron ejecutadas bajo la misma práctica. “Masacraron niños discapacitados, sordomudos… una familia constituida que quedó destrozada”, recordó con voz quebrada otra de las madres que tomó la palabra.

El ministro Pedro Sánchez, visiblemente conmovido, pidió perdón en nombre de la Nación: “Pido excusas públicas a ustedes, los familiares de los 27 hombres que hoy no están con nosotros. Fueron víctimas de acciones ilegales y repudiables por parte de algunos integrantes de la Fuerza Pública”, declaró.

Sin embargo, las víctimas no ocultaron su inconformidad. Para ellas, las disculpas deberían venir del propio expresidente Uribe, jefe máximo de las Fuerzas Armadas durante el auge de los falsos positivos. “Quien debería estar aquí pidiendo perdón es Álvaro Uribe”, reclamó otra mujer, mientras sostenía la foto de su hijo asesinado.

Rafael Gaitán, abogado de varias de las familias, aseguró que el acto “deja sin piel las versiones de quienes han negado la verdad de las ejecuciones extrajudiciales”. Según él, “se confirma lo que por años las víctimas denunciaron: los falsos positivos no fueron un mito, fueron una política criminal sistemática”.

Entre 2003 y 2008, las unidades militares de la Brigada XVI en Casanare asesinaron campesinos inocentes para inflar resultados. Algunos de los reclutados eran llevados con engaños desde otras regiones del país, para luego ser ejecutados y disfrazados de guerrilleros.

“Yo no solo perdí a mi hermano, perdí a mi madre, que murió meses después, consumida por el dolor”, relató una mujer que hoy exige justicia más allá de los gestos simbólicos.

El Gobierno intenta cerrar las heridas con actos de perdón, pero el nombre de Uribe vuelve a quedar en el centro del debate. Porque para las madres de los falsos positivos, el verdadero perdón no llegará de un ministro, sino del presidente que, según ellas, permitió que la tragedia ocurriera bajo su mando.

También te puede interesar

Éste sitio web usa cookies, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de cookies