¡Quisieron tumbar a Petro en pleno vuelo! Revelan plan con misiles para derribar al mandatario

Una amenaza con misiles obligó a desviar el avión presidencial de Petro, quien sigue en la mira de mafias que buscan silenciarlo a toda costa.

Colombia vuelve a estremecerse ante la confirmación de un dato escalofriante: el presidente Gustavo Petro sigue siendo blanco de amenazas letales, esta vez con misiles que habrían tenido como objetivo derribar su avión presidencial durante su regreso de Europa.

Aunque la Casa de Nariño no ha emitido un comunicado oficial, tres fuentes cercanas al círculo presidencial advirtieron que el avión del jefe de Estado tuvo que desviar su ruta original por una alerta de seguridad que estremeció a todo el esquema de protección. El itinerario, que debía concluir en Bogotá a las 9:10 p.m., terminó inesperadamente en Pereira, donde el mandatario fue retirado de inmediato directamente desde la pista, sin pisar la terminal.

En medio del revuelo, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, no se guardó nada: “El comandante supremo de las Fuerzas Armadas siempre será un objetivo militar para aquellos que representan una amenaza y por eso es la seguridad del presidente de la República”, sentenció, dejando claro que el Gobierno no bajará la guardia ni un segundo.

La amenaza no es un rumor aislado. Ya en febrero, el propio presidente encendió las alarmas al denunciar públicamente que narcotraficantes habrían adquirido misiles para derribar su avión: “General Triana, eso es lo que usted tiene que romper. Yo sé que asusta. Usted sabe que a mí me quieren disparar un misil a mi avión, que se compraron los narcotraficantes y que tienen guardado por ahí. No uno, sino dos misiles. Sabemos quiénes son”, denunció el mandatario sin rodeos, mientras miraba de frente a la cúpula de seguridad del país.

Las palabras de Petro no cayeron en saco roto. Hoy, tras la nueva alerta en pleno vuelo transatlántico, el ministro Sánchez enfatizó que la seguridad presidencial se ha robustecido al máximo: “Se ha dispuesto de todas las capacidades, no solamente de inteligencia, sino también operativas para garantizar en profundidad la seguridad del presidente donde se desplace”, aseguró.

El Gobierno es consciente de que cada paso del presidente es vigilado. Prueba de ello es la confirmación del director de la Policía Nacional, general Carlos Fernando Triana, quien recalcó que cualquier información relacionada con la seguridad presidencial es prioridad absoluta:

“Toda la información que haga referencia a la seguridad del presidente de la República es valorada y revisada, en coordinación con la jefatura de seguridad presidencial”, sostuvo Triana en entrevista con La W Radio, donde además respaldó la decisión de desviar el vuelo ante cualquier indicio de riesgo.

No es la primera vez que un presidente colombiano se enfrenta a intentos criminales para silenciarlo. El propio ministro Sánchez recordó los ataques fallidos contra Álvaro Uribe y el atentado que casi cobra la vida del expresidente Iván Duque en Cúcuta. Hoy, la amenaza se cierne sobre Petro, pero con un detalle aún más inquietante: los tentáculos del narcotráfico estarían dispuestos a usar armamento pesado para callar la voz de un mandatario que ha puesto contra las cuerdas a redes criminales históricas.

Pese al silencio oficial, las palabras del ministro y la Policía no dejan lugar a dudas: la seguridad de Gustavo Petro es un asunto de Estado, que se refuerza día y noche ante cualquier sombra de conspiración.

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