¡Un homenaje histórico! Petro honra a Mujica con la Cruz de Boyacá por su lucha inquebrantable por la paz en Latinoamérica

Gustavo Petro entregó la Cruz de Boyacá a José Mujica en un emotivo acto en su chacra en Uruguay, destacando su legado como defensor de la paz y la reconciliación en Latinoamérica.

En un emotivo encuentro cargado de simbolismo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, entregó la Cruz de Boyacá, la máxima condecoración civil colombiana, al expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica. La ceremonia tuvo lugar en la icónica chacra de Mujica, ubicada en Rincón del Cerro, un espacio que refleja la humildad y el legado del líder uruguayo.

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Petro, el primer presidente de izquierda en la historia de Colombia, llegó al lugar alrededor del mediodía acompañado de una comitiva que destacó la importancia del evento. Durante la breve pero significativa ceremonia, Petro resaltó el papel de Mujica como un referente en la integración latinoamericana, calificándolo como un «defensor incansable de la paz y el diálogo».

El decreto oficial que otorga la Cruz de Boyacá destaca el compromiso de Mujica con la reconciliación y la justicia social, valores profundamente alineados con los esfuerzos actuales del gobierno colombiano. “Ha demostrado que la violencia nunca es la respuesta para resolver diferencias políticas”, se lee en el documento, marcando un paralelismo entre las luchas de ambos líderes por construir sociedades más equitativas.

La entrega de la condecoración fue solo uno de los puntos altos en la agenda de Petro en Uruguay. Esta semana, el mandatario colombiano participa en la cumbre del Mercosur, que reúne a los presidentes de los países miembros para debatir sobre el futuro de la región. Antes del encuentro con Mujica, Petro sostuvo reuniones clave con el presidente electo Yamandú Orsi y el actual mandatario Luis Lacalle Pou.

El ambiente de camaradería en la chacra se extendió más allá de la ceremonia. Tras tomarse algunas fotos, ambos líderes se retiraron a la casa de Mujica para un diálogo más privado. Por si fuera poco, se espera que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, también visite a Mujica durante su estancia en Uruguay, lo que refuerza la relevancia de este encuentro en el contexto regional.

La decisión de Gustavo Petro de condecorar a José Mujica no es solo un gesto diplomático, sino un mensaje claro sobre los valores que deben guiar a Latinoamérica en tiempos de incertidumbre. La figura de Mujica, conocida por su austeridad y compromiso con la equidad, sigue inspirando a líderes de toda la región.

Con este reconocimiento, Petro subraya la importancia de la paz y el diálogo como pilares fundamentales para enfrentar los retos del continente, recordándonos que la unión y la esperanza son herramientas poderosas para transformar realidades.

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