Luis Carlos Leal denuncia irregularidades en cuatro EPS antes de su salida de esta entidad, exponiendo la presunta red de corrupción de Mario Andrés Urán

La Superintendencia Nacional de Salud investiga posible corrupción liderada por Mario Andrés Urán, quien habría manipulado contratos y dirigido pagos en tres EPS intervenidas, comprometiendo la gestión de recursos y la seguridad de los funcionarios.

La Superintendencia Nacional de Salud ha tomado medidas enérgicas tras recibir el 22 de septiembre de 2024 una denuncia sobre la supuesta injerencia de Mario Andrés Urán en la administración de recursos de salud de diversas EPS. En un ejercicio de sus competencias, la entidad decidió implementar acciones inmediatas.

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El 24 de septiembre, ante la gravedad de la situación expuesta en la denuncia, la Superintendencia emitió cuatro actos administrativos que ordenaban auditorías a Coosalud EPS S.A. y a tres EPS intervenidas: Servicio Occidental de Salud S.A. S.O.S., Asmet Salud EPS S.A.S., y Emssanar EPS S.A.S. Estas auditorías se realizaron de manera simultánea el 25 de septiembre en las sedes de las EPS en las ciudades de Cartagena, Cali, Popayán y Pasto, y se llevaron a cabo sin previo aviso.

Una investigación reciente ha revelado una posible colusión encabezada por Mario Andrés Urán, quien, en su calidad de asesor en Coosalud, una EPS que no se encuentra intervenida, habría manipulado la postulación de contratos en favor de las mismas Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) vinculadas a tres EPS que sí están bajo intervención. Además, se ha encontrado una preocupante concentración de pagos hacia determinadas IPS, sin justificación adecuada, lo que ha perjudicado el flujo de recursos destinados a otras entidades de salud.

La situación se complica aún más por los costos adicionales ocasionados por pagos a terceros para funciones que, por norma, deberían ser llevadas a cabo por los agentes interventores. También se ha documentado que Urán exigía autorización para la postulación de giros directos de recursos por parte de los interventores, lo que refleja un control excesivo sobre la gestión financiera.

Asimismo, se han denunciado preferencias hacia laboratorios y marcas específicas, aparentemente orquestadas por Urán en colaboración con Indira Ocando y Tony Negrette. Por si fuera poco, han surgido informes sobre intimidaciones dirigidas a funcionarios de la Superintendencia, lo que no solo compromete su seguridad personal, sino que también afecta su desempeño y funciones dentro de la entidad.

La Superintendencia Nacional de Salud aclara que las EPS bajo intervención no son coadministradas y que los agentes interventores no son parte de su personal. En este sentido, las EPS seguirán bajo estrictas medidas de inspección y control.

Como resultado de las evidencias recabadas, el Superintendente Nacional de Salud, Luis Carlos Leal Angarita, presentó el 22 de octubre de 2024 una denuncia formal ante la Fiscalía General de la Nación, solicitando una investigación exhaustiva sobre las pruebas obtenidas en estas indagaciones.

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