Se derrumba el imperio Char: mano derecha de Álex Char colaborará con la Fiscalía para destapar años de corrupción y lavado de dinero

Héctor Amaris Rodríguez, mano derecha de Álex Char, ha decidido colaborar con la Fiscalía y revelar pruebas sobre la corrupción que durante años habría beneficiado al Clan Char.

Héctor Amaris Rodríguez, mano derecha de Álex Char y conocido dentro de su círculo cercano como «El Oso Yogui», ha decidido colaborar con la Fiscalía General de la Nación y revelar detalles sobre la corrupción sistemática que durante años ha beneficiado a la familia Char y su red de aliados políticos y empresariales.

Desde Miami, Amaris ha hecho pública su decisión de aportar pruebas documentales, registros financieros y testimonios que comprometen directamente a Álex Char y su estructura de poder. Entre los casos más graves que denunciará se encuentran los presuntos desvíos millonarios en la empresa de servicios públicos Triple A, la manipulación de licitaciones para favorecer a empresas vinculadas al clan Char, el financiamiento ilegal de campañas políticas y el lavado de dinero a través de Supertiendas Olímpica.

Durante más de 14 años, Amaris Rodríguez fue testigo privilegiado del funcionamiento interno de esta maquinaria de corrupción. Su testimonio, que promete ser devastador, expone cómo se desviaron recursos públicos, se garantizaron contratos amañados y se aseguraron mecanismos de impunidad dentro de las instituciones. También se refirió a la compra de votos y la obstrucción de la justicia en el caso de Aida Merlano, asegurando que aportará nuevas pruebas que esclarecerán definitivamente lo sucedido.

Amaris también ha señalado que su familia ha sido víctima de hostigamientos y persecuciones, y ha solicitado garantías de protección ante los riesgos que implica su decisión. Su testimonio no solo busca esclarecer la corrupción en la que estuvo involucrado, sino también limpiar el nombre de su padre, quien, según él, murió condenado injustamente por un delito que no cometió.

Las declaraciones de Amaris Rodríguez representan un golpe sin precedentes para una de las familias más influyentes del Caribe y de Colombia. La Fiscalía ahora tiene en sus manos información que podría desencadenar un terremoto político y empresarial en el país.

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