La memoria histórica y el arte urbano sufrieron un nuevo golpe en Cali. El mural “Las cuchas tienen razón”, pintado en el puente de La Luna como homenaje a las madres de víctimas de desaparición forzada, fue cubierto de gris por una cuadrilla de la Secretaría de Infraestructura. La administración de Alejandro Eder intentó justificarse argumentando que se trató de un «error», pero la acción ha sido interpretada por muchos como un acto de censura y negacionismo.
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La obra, creada el pasado 19 de enero, se sumó a las expresiones de solidaridad con las víctimas de la Operación Orión en Medellín, una intervención militar llevada a cabo en 2002 bajo la presidencia de Álvaro Uribe, en la que fuerzas estatales y paramilitares fueron señalados por desapariciones forzadas. Este mural se convirtió en un símbolo de lucha y resistencia, lo que molestó a sectores conservadores y a la administración municipal, que hoy busca minimizar su impacto con explicaciones vagas.
Luz Adriana Vásquez Trujillo, secretaria de Infraestructura, afirmó que la eliminación del mural no estaba “priorizada” y que las cuadrillas estaban destinadas a la pintura de bordillos en la zona. Sin embargo, este argumento no ha convencido a la comunidad, que ve en este acto una continuación de la política de negación del conflicto y de la represión de las expresiones artísticas con contenido político y social.
#LaMemoriaNoSeBorra#Censura
— Andrea Rincón Acevedo (@andrerinconacev) February 19, 2025
La alcaldía de la "reconciliación" de @alejoeder continúa tapando los murales de "las cuchas tienen razón en Cali". Hoy están borrando el de La Luna
¿Por qué les da tanto miedo la memoria? pic.twitter.com/XYLjOFfWkv
El mural en Cali no ha sido el único en la mira de las autoridades. En Medellín, un mural con el mismo mensaje fue borrado bajo la administración de Federico “Fico” Gutiérrez, tras el hallazgo de restos humanos en La Escombrera, en la Comuna 13, donde se presume que fueron enterradas víctimas de desaparición forzada. Esta acción generó una ola de indignación en distintas ciudades del país, donde colectivos artísticos y defensores de derechos humanos han respondido con nuevas pintadas y movilizaciones.
Lejos de ser un hecho aislado, el borrado del mural en Cali se suma a una serie de decisiones que revelan la postura de la administración de Alejandro Eder frente a la memoria histórica y el arte urbano. Aunque la Secretaría de Paz y Cultura Ciudadana ha intentado calmar los ánimos con un discurso de reconciliación, la eliminación del mural ha dejado en evidencia la falta de compromiso real con la verdad y la justicia.
Varios murales en Cali porque LAS CUCHAS TIENEN RAZÓN
— Alfredo Mondragón – Congresista Valle del Cauca (@AlfreMondragon) January 19, 2025
La juventud popular se alza en la rebelión los pinceles para decir con esperanza y alegría que jamás el silencio, jamás la impunidad, jamás el gris tapando la verdad. pic.twitter.com/duFGyXyv1J
Las reacciones no se han hecho esperar. Usuarios en redes sociales han cuestionado duramente a la alcaldía, señalando la contradicción entre su discurso de «reconciliación» y sus acciones. “La alcaldía de la ‘reconciliación’ de Alejandro Eder continúa tapando los murales de ‘Las cuchas tienen razón’ en Cali. Hoy están borrando el de La Luna. ¿Por qué les da tanto miedo la memoria?”, escribió una usuaria en X.
A pesar de los intentos de censura, la memoria sigue viva. En Manizales, colectivos artísticos han convocado una jornada punk contracultural en torno al mural, con música en vivo, estampado colectivo y testimonios de víctimas del conflicto armado. Bajo el lema “Alzamos la voz por la memoria y la justicia. No olvidamos a los muertos de La Escombrera”, esta iniciativa demuestra que la lucha por la verdad no se puede silenciar con pintura gris.