La impunidad vuelve a hacer de las suyas en Colombia. La Corte Suprema de Justicia decidió otorgarle el beneficio de casa por cárcel a Bernardo Moreno Villegas, exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia (DAPRE) en el gobierno de Álvaro Uribe, condenado por el escándalo de la ‘Yidispolítica’. Un golpe a la justicia y un mensaje de que, para ciertos sectores del poder, las condenas son apenas un trámite.
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Moreno, quien había sido sentenciado a cinco años y medio de prisión por tráfico de influencias, ahora podrá cumplir su pena desde la comodidad de su hogar. La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema, bajo el despacho del magistrado Jorge Emilio Caldas, justificó la decisión argumentando que el exfuncionario tiene 66 años y que es poco probable que reincida.
La decisión de concederle la prisión domiciliaria a Moreno revoca una sentencia previa que le había negado este beneficio. La Corte argumentó que el exdirector del DAPRE tiene un supuesto arraigo familiar y social, lo que lo hace poco propenso a huir. Además, señalaron que lleva más de una década fuera del sector público, como si eso borrara su papel en una de las tramas de corrupción más descaradas de la historia reciente.
Uribe solicita privilegios para su exfuncionario Bernardo Moreno, condenado por la Yidispolítica. Caen los subalternos, pero no el patrón. Es hora de que Uribe caiga. pic.twitter.com/6whSHuhRUa
— Fabian Diaz (@FabianDiazPlata) February 25, 2025
Según el fallo, Moreno desempeñó un rol clave en la compra de votos para la reelección de Uribe en 2006. Facilitó la entrega de notarías y otros cargos burocráticos a cambio de apoyo político, garantizando que la reforma constitucional que permitió la segunda presidencia del exmandatario pasara sin obstáculos. Aun así, la Corte cree que su «resocialización» es posible desde su casa, en lugar de en una celda.
El argumento de que Moreno no representa un peligro para la sociedad resulta inaceptable. No se trata de un delito menor ni de una simple omisión: su influencia permitió que se torciera la voluntad popular y que el país fuera gobernado durante cuatro años más por un presidente que manipuló las instituciones a su favor. A pesar de esto, la justicia parece blanda con él, como lo ha sido con tantos otros aliados del uribismo.
El alto tribunal también mencionó que Moreno se presentó voluntariamente a las autoridades, como si cumplir con su deber fuera mérito suficiente para merecer trato especial. Mientras tanto, miles de colombianos sin poder político cumplen sentencias completas en condiciones deplorables.
#LaSillaEnVivo | La @CorteSupremaJ le concedió prisión domiciliaria a Bernardo Moreno, exsecretarío general de la presidencia.
— La Silla Vacía (@lasillavacia) February 26, 2025
Está cumpliendo una condena de 5 años por tráfico de influencias en el caso de la Yidispolítica.https://t.co/7Kx81drRiC
Este caso deja claro que en Colombia no todos los condenados son tratados por igual. Mientras líderes sociales y manifestantes son perseguidos con todo el peso de la ley, quienes han sido parte de los más grandes escándalos de corrupción en la historia reciente gozan de beneficios especiales.
El país no olvida que Moreno movió sus influencias para entregar cargos en el Sena, la Red de Solidaridad Social y hasta en notarías para pagar favores políticos. Su responsabilidad en la ‘Yidispolítica’ está probada, pero la justicia parece querer borrar su culpa.