Auditoría forense revela irregularidades en contratación del ICBF: El cambio avanza contra la corrupción

A través de su cuenta de X, la Directora del ICBF, Astrid Eliana, hizo revelaciones preocupantes sobre contrataciones y operadores que posiblemente estarían malversando dineros de la niñez.

El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), en colaboración con la Secretaría de Transparencia, ha llevado a cabo una exhaustiva auditoría forense en el ámbito de contratación, revelando una serie de irregularidades que requieren atención inmediata.

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En el análisis detallado, se encontraron 220 contratos en manos de 59 operadores, quienes presentaban diversas coincidencias preocupantes. Entre estas coincidencias se destacan aspectos como el mismo representante legal, dirección de domicilio, características en el formato de constitución, fecha de constitución y errores en el objeto y alcance. Este patrón suscita cuestionamientos sobre la transparencia y la equidad en el proceso de contratación.

Adicionalmente, se identificó un registro de personal en las nóminas reportadas al ICBF por un monto superior al realmente pagado a los colaboradores. Esta discrepancia plantea serias dudas sobre la gestión financiera de los operadores y la posible malversación de recursos destinados a la atención de la niñez.

Otro hallazgo inquietante es el incumplimiento al objeto de los contratos celebrados. Se constató que el número de niños atendidos no correspondía a los cupos otorgados y pagados, evidenciando una falta de compromiso por parte de algunos operadores.

En el análisis de contratos adjudicados en años anteriores, se observó una práctica evasiva para evitar el pago a proveedores al ejecutar proyectos en menor tiempo del estipulado inicialmente. A pesar de esta aceleración, se realizaba el cobro al instituto como si se hubiese cumplido en el plazo establecido, generando posibles irregularidades financieras.

Lamentablemente, los contratos de algunos operadores también se relacionaron con un alto índice de casos de muertes de niños asociadas a la desnutrición. Como resultado, el ICBF ha decidido dejar de contratar con estas instituciones, priorizando el control y la supervisión ciudadana.

El informe revela que ciertas organizaciones o fundaciones con contratos para la atención de la niñez en Colombia mantienen conexiones directas con clanes políticos. En el marco del «Gobierno Del Cambio», se destaca que los recursos destinados a los niños y niñas son considerados una responsabilidad y no un negocio.

Durante la revisión de documentos en las carpetas de contratación del ICBF, se descubrió presunta documentación falsificada para respaldar la experiencia de los operadores que atienden a la primera infancia. Estos casos han sido puestos a disposición de las autoridades competentes para las correspondientes sanciones.

Frente a estos hallazgos, el ICBF y la Secretaría de Transparencia reiteran su compromiso en la lucha contra la corrupción y aseguran que los casos serán llevados ante las instancias judiciales pertinentes. Este enfoque determinado refleja la firmeza del #CambioAvanza, subrayando que la corrupción no será tolerada en la gestión de los recursos destinados al bienestar de los niños y niñas en Colombia.

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