Petro lanza ultimátum al Senado: Si no aprueban la consulta popular en 30 días, la convocará por decreto

En un fuerte pulso institucional, Petro advirtió que si el Senado no debate la consulta popular en 30 días, la convocará por decreto. El pueblo, dijo, no será silenciado.

«Si le quitan la voz al pueblo, dejan de ser legítimos», así lo sentenció el presidente Gustavo Petro en el último Consejo de Ministros que terminó siendo un verdadero campanazo político. En medio de crecientes bloqueos institucionales, el jefe de Estado no se guardó nada: denunció censura, criticó a los congresistas que sabotean sus reformas y dejó en firme una advertencia que ya genera remezones en el Congreso.

Petro fue claro: si el Senado no discute en el próximo mes la consulta popular que su gobierno radicará el 1 de mayo, él mismo la convocará por decreto, tal como lo permite la ley. Se trata de una herramienta legítima que, según la Constitución, puede activar el presidente si el Congreso guarda silencio frente a temas fundamentales para el pueblo.

La consulta, compuesta por 12 preguntas clave, buscaría rescatar puntos esenciales de la reforma laboral que fue hundida en marzo por maniobras legislativas del uribismo y el Partido Liberal. Pero ahora, tras una nueva propuesta presentada por el senador liberal Miguel Ángel Pinto, el mismo que antes ayudó a hundir la iniciativa, el presidente puso el dedo en la llaga: “¿El Partido Liberal está pretendiendo taparle la boca al pueblo?”

La advertencia fue contundente: si el Senado no actúa “de buena fe” y decide ignorar la voz ciudadana, entonces será el Ejecutivo quien le devuelva el poder al pueblo. “Una institución se vuelve ilegítima si le quita la voz al mandante”, insistió el mandatario, dejando claro que no está dispuesto a ver cómo intereses políticos frenan los cambios que millones de colombianos esperan.

Además, Petro denunció que sectores del Estado, a los que calificó de “duquistas”, lo están censurando. Criticó que se impida la transmisión de los consejos de ministros en televisión pública, mientras se permite que medios privados lo ataquen sin freno. “Eso no es democracia, es parcialidad. Y está podrido”, dijo sin rodeos.

Por su parte, el ministro del Interior, Armando Benedetti, explicó que si la consulta es aprobada por el Congreso y alcanza el umbral en las urnas, unos 13,6 millones de votos, tendrá fuerza vinculante. Si después de eso el Congreso no actúa, Petro podrá legislar por decreto, como lo contempla la ley.

El mensaje es claro: no hay tiempo para dilaciones ni juegos políticos. El pueblo tiene derecho a decidir. Y si el Congreso decide mirar para otro lado, el presidente ya tiene listo el camino para que los colombianos se pronuncien directamente en las urnas.

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