En una encendida intervención desde la Plaza de Armas de la Casa de Nariño, frente a cientos de jóvenes del SENA que respaldan su consulta popular, el presidente Gustavo Petro lanzó una de las denuncias más contundentes desde que asumió el poder: aseguró que está en marcha un complot internacional para tumbarlo, coordinado por su propio excanciller Álvaro Leyva y el congresista estadounidense de extrema derecha Mario Díaz-Balart.
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«Está buscando a los congresistas de la Comisión de Acusaciones para tumbar al presidente», advirtió Petro al referirse directamente a Leyva, quien, según el mandatario, está impulsando una campaña de desprestigio basada en falsas acusaciones. El presidente fue aún más claro al identificar a quien, según él, estaría detrás de las reuniones conspirativas: «El que dirige la reunión no es un colombiano, es el senador de los Estados Unidos, Díaz-Balart, de extrema derecha. Él es el jefe».
🗣️"Lo que sí sé es por qué la escribió (la carta, Álvaro Leyva), no la escribió por viejo amargado porque su hijo no pudo ser canciller, él anda buscando a los congresistas de la Comisión de Acusaciones para buscar que tumben al presidente", @petrogustavo. pic.twitter.com/uda6XMPYKu
— RTVC Noticias (@RTVCnoticias) May 6, 2025
La acusación no es menor. Petro aseguró que esta operación es impulsada desde Washington por los sectores más radicales de la política estadounidense. “No critico al Gobierno actual de Estados Unidos porque creo que no es, espero no equivocarme; es la extrema derecha estadounidense, la misma que mató a John F. Kennedy en Estados Unidos», subrayó con firmeza, generando una ovación entre sus seguidores.
El detonante de esta grave denuncia fue la difusión de una carta escrita por el excanciller Leyva, quien fue destituido en 2024 y que, desde entonces, ha desatado una ofensiva mediática contra el presidente, acusándolo de supuesta adicción a las drogas. Petro desestimó completamente esos señalamientos y los calificó de «mentiras enfermas» que buscan justificar una jugada golpista.
Ciudadanas, ciudadanos:
— Álvaro Leyva Durán (@AlvaroLeyva) May 6, 2025
Para su conocimiento me permito enviarles el texto de la carta que en horas de la tarde del día de ayer 5 de mayo de 2025, le hice llegar al Presidente de la República Gustavo Petro Urrego. Abro hilo 🧵👇🏼 pic.twitter.com/03GWe0vHBs
“Lo que ha salido en el día de hoy no es un chisme. Es un complot. Y no es nacional. No es de colombianos, aunque haya colombianos. Y por tanto es peligrosísimo porque es un atentado a la soberanía nacional de Colombia y a la democracia y a la libertad de los colombianos”, afirmó el mandatario, subiendo el tono de alarma sobre la gravedad de los hechos.
Petro no se guardó nada. Insistió en que si este plan avanza y logra sus objetivos, la respuesta del pueblo colombiano será contundente. “Si eso llegase a pasar debe estallar la revolución colombiana, porque es un infundio de los nazis en Estados Unidos. ¡Y no renuncio!”, sentenció con vehemencia, mientras los asistentes coreaban su nombre.
En su discurso, también arremetió contra el comportamiento de Leyva desde su salida del gobierno: “No son las locuras de un viejo decrépito que está sanando la herida de no poder haber seguido siendo canciller, o su hijo. La culpa no la tiene el viejo. Esto es algo más profundo”.
🗣️"No es un chisme de un viejo loco, es un complot internacional contra el presidente", @petrogustavo.
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Y es que la denuncia del presidente no se limita a nombres propios. Petro también apuntó a miembros del Consejo Nacional Electoral, a quienes acusó de haber iniciado un proceso por presunta violación de topes electorales desde que él llegó al poder, sin pruebas reales. “Cogieron unos consejeros del consejo electoral, que no son jueces, bastante oscuros, y se inventaron un proceso”, dijo.
Por su parte, Díaz-Balart, el congresista republicano señalado, no ha escondido en el pasado su desprecio hacia Petro. En declaraciones anteriores, lo acusó de “respaldar al ELN” y de “dañar las relaciones entre Colombia y EE.UU.”. Pero ahora, según Petro, su papel es mucho más grave: estaría liderando un intento de desestabilización institucional en otro país.
Petro concluyó con un mensaje claro y directo a quienes buscan sacarlo del poder por vías ilegítimas: “El presidente se irá el 7 de agosto como el pueblo ordenó, no antes y no con mentiras ni trapizondas. Así que Álvaro Leyva, dígale a Díaz-Balart: si se intenta derribar como extranjero al presidente de Colombia, estallará la revolución colombiana”.